Tus palabras las escribes en el papel higiénico.

Me entra la risa al pensar que algún día confié en vosotros, que algún día os consideré mis amigos. Me dais lastima por ser tan falsos. Presumís de que estáis juntos ¿De verdad pensáis que me molesta que esteis unidos? Lo único que me molesta es haber estado tan ciega como para deciros mi nombre, no os merecíais ni eso. ¿Cómo podéis criticar tantísimo a una persona y luego podéis estar con esa persona como si fueseis los mejores amigos del mundo? Hay que ser muy falso o muy frío. Solo diré que espero encontrarme con vosotros algún día, que espero que entendáis que cada uno recoge lo que siembra, y que por eso yo tengo a los amigos que tengo y vosotros os tenéis entre vosotros...
Podría decir mil palabras feas, podría hablar mal de vosotros a las espaldas, podría inventarme miles de cosas, pero prefiero ser feliz con mi gente a perder el tiempo hablando de aquellos que no merecen ni una letra de mi nombre.